Cómo elijo mi plan de pensiones ideal
Qué criterios deberás tener en cuenta para decantarte por el plan de pensiones que mejor responda a tus necesidades
¿Has decidido comenzar a ahorrar a través de un plan de pensiones? Enhorabuena. Desde el momento en que empieces, disfrutarás de dos grandes ventajas: Por un lado, estarás reforzando los recursos para tu futura jubilación, ya que podrás recuperar en forma de renta, capital o mixta el ahorro acumulado en el mismo. Por otro lado, contarás con un buen aliado para reducir la factura fiscal todos los años, pues podrás deducirte las cantidades aportadas hasta un máximo de 8.000 euros anuales.
Una vez realizado este primer paso, deberás elegir el plan de pensiones que se adapta a tus necesidades. Existe una gran variedad de planes de pensiones que se adaptan a los muy diversos perfiles de ahorrador que existen. Es importante hacer una valoración previa acerca de qué características te definen como ahorrador para poder canalizar las aportaciones en el vehículo correcto. Elegir un plan que no se adapta a nuestras necesidades puede tener importantes consecuencias, como incurrir en pérdidas en un momento en el que no deberíamos asumir riesgos.
Para elegir adecuadamente, deberás analizar tu situación en base a los siguientes factores:
Tu edad, y por tanto, lo alejado que te encuentras de tu jubilación
El tiempo es un factor fundamental en todo proceso de ahorro. Cuanto mayor es el plazo del que disponemos hasta el objetivo, mayor será el margen de maniobra del que dispongamos y mayor nivel de riesgo podremos asumir en busca de una rentabilidad adicional. Recuerda que mayores rentabilidades implican asumir siempre mayor nivel de riesgo.
Si te encuentras temporalmente alejado de tu jubilación, y por tanto del momento en el que vayas a hacer uso de tu ahorro, tu perfil inversor será decidido: Puedes y debes buscar rentabilidades más elevadas en este momento, pues así compensarás las rentabilidades más reducidas a las que optarás más adelante, cuando no puedas asumir riesgos o los debas asumir en menor medida.
Cuanto mayores seamos, menos riesgos deberemos asumir
A medida que te encuentres más cerca de la jubilación, tu perfil de inversión se irá volviendo más moderado: deberás ir reduciendo la exposición a riesgos paulatinamente hasta eliminarlos por completo cuando te encuentres a unos pocos años de la jubilación. En ese momento, primará la necesidad de preservar el ahorro frente a la obtención de rentabilidad adicional.
Lo que quieras involucrarte en la gestión del plan a lo largo de los años
Es posible realizar traspasos de forma ágil y sencilla de los derechos acumulados en un plan de pensiones. Esto es esencialmente importante a la hora de ir adaptando nuestros planes a la evolución que va experimentando nuestro perfil de riesgo con el paso del tiempo. El plan de pensiones que se adapta a nuestras necesidades no será el mismo a los 30 años que a los 45 o 60 años.
Para aquellos que prefieran desentenderse de la gestión activa que requiere esta situación, existen lo que se conocen como planes de pensiones de ciclo de vida, que van adaptando la exposición al riesgo según pasa el tiempo.
Así, un partícipe que se vaya a jubilar en, por ejemplo, 2030, deberá elegir un plan de pensiones con vencimiento 2030 o cercano, de tal modo que delegará en la gestión de un único plan el ahorro hasta el mismo momento de la jubilación. Serán los gestores del mismo los encargados de adaptar la inversión al momento temporal correspondiente.
Ojo con valorar el plan por su rentabilidad pasada
Una de las tentaciones de muchos ahorradores es valorar un plan por la rentabilidad que ha arrojado en el pasado. Esto puede inducir a no estar haciendo un análisis correcto, pues una de las máximas en el ámbito de la inversión es que rentabilidades pasadas no son en ningún caso garantía de rentabilidades futuras.
Sin embargo, y teniendo en cuenta esto último en todo caso, el análisis de la rentabilidad histórica a largo plazo sí que puede ser indicativo de la consistencia en la gestión de un plan, pues nos dará una idea de cómo se ha comportado en distintos entornos de mercado (alcistas y bajistas) frente a otros planes o frente a su índice de referencia.