Cómo mantener una vida plena en la era de la longevidad
Alcanzar una edad muy avanzada ya no es una proeza de la naturaleza. Ocurre a escala global y ha sido considerada por ‘Naciones Unidas’ como una de las transformaciones sociales más significativas del siglo XXI. Tanto es así que ha traído un fenómeno nuevo, la convivencia de hasta cuatro generaciones que comparten un momento único e irrepetible como es el actual. ¿Lo habías pensado?
Como es justo destacar, esta ‘vida larga’ viene a resultas de los avances de la medicina que, por un lado, han eliminado considerablemente ciertas enfermedades mortales y por el otro, a la insistente educación en prevención por parte de estos profesionales sanitarios a la población mundial.
Pero como lógicamente convendremos, este éxito no sería un valor si viene acompañado de una pérdida de calidad de vida, con una mala salud y una pérdida de autonomía.
Particularmente existen áreas denominadas ‘Zonas Azules’, dotadas de unos datos sorprendentes, con un gran número de personas centenarias que, además, gozan de una salud que podrían ser motivo de envidia de aquellos países más industrializados. Estos paraísos de la longevidad se encuentran en Okinawa (Japón), Cerdeña (Italia), Loma Linda (California), Nicoya (Costa Rica) e Icaria (Grecia), pero si no naciste en alguno de estos lugares no te preocupes. La ciencia ha demostrado que los genes juegan un papel mucho más pequeño de lo que se creía originalmente y que los factores ambientales como la dieta y el estilo de vida inciden en mayor grado para gozar de esta ansiada longevidad.
Si te preguntas por algunos de estos secretos, los científicos han encontrado algunas particularidades que puedes aplicar a tu vida, tengas la edad que tengas. Veamos algunos:
- Conoce tu propósito. Tener una razón para vivir alarga la vida con un estado físico y mental saludable.
- Reduce la ingesta por la noche. Los beneficios del ayuno intermitente parece que inciden en esta buena condición de vida.
- Únete a una comunidad basada en el desarrollo de la espiritualidad, al igual que las comunidades religiosas llevan practicando durante siglos.
- Mantén relaciones saludables, ya sean amorosas o amistosas. Ponle empeño.
- Incorpora actividades de ejercicio físico al aire libre, como podrían ser caminatas o ejercicios de pilates o yoga.
- Reduce el estrés y procura mantenerlo en el tiempo. Algún curso sobre meditación o mindfulness puede ayudarte a conseguirlo.
- Come muchas verduras y otros alimentos orgánicos.
- Consume vino, pero con moderación. Incluso practícalo con los que te sugiere el siguiente punto.
- Elige a tu gente con sabiduría. Un buen círculo de apoyos te hará más ameno el camino hacia esta etapa que algunos ya llaman como la ‘Cuarta Edad’.
Como ya sabrás por experiencia propia, la jubilación ya no significa el retiro absoluto, más bien todo lo contrario, la jubilación puede ser uno de los períodos más agradables de nuestras vidas, pero ¿has pensado que tienes varias décadas de vida por delante? 20 años, como poco, para retomar alguna vocación frustrada o para iniciarte en nuevas competencias con los secretos que hemos aprendido de estas ‘zonas azules’ de las que hablábamos.
Interpreta el envejecimiento como una oportunidad y no como un proceso de declive porque tu vida te pertenece, hasta el último segundo. Vivir saludable, en comunidad y con un propósito te permitirá vivir, mucho y bien. ¿Te animas?
(*) Francisco Olavarría Ramos es Gerente del Consejo Español para la Defensa de la Discapacidad y la Dependencia. Licenciado en Comunicación, gerontólogo social y activista por los derechos de las personas adultas mayores.
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