Cuatro consejos para anticiparse a la cuesta de enero
Hacer una lista de ingresos y gastos de diciembre y enero, reducir deudas o gastar en cosas que generen ahorro pueden ayudar a superar esta fase.
La llegada del nuevo año es un momento ideal para hacer balance de tus finanzas, tomar la iniciativa de tus planes de ahorro y jubilación e incluir esos objetivos en los propósitos navideños. En estas fechas normalmente se reciben ingresos adicionales en forma de regalos o pagas extra pero también es cierto que los gastos y las compras se disparan. Si esos gastos se descontrolan, la cuesta de enero será muy difícil de superar.
La planificación financiera es vital y la forma en la que diversificas tus gastos hará que saques el mayor provecho a tus ingresos. Una buena planificación ayudará a que las finanzas familiares terminen el año en positivo y puedan afrontar mejor la cuesta de enero.
En este artículo te proponemos algunos consejos, inspirados en algunas recomendaciones de asesores a sus clientes, para salir airoso de esta cuesta de comienzos de año.
Haz una lista de ingresos y gastos de diciembre y enero
Normalmente no tenemos la costumbre de poner por escrito todos nuestros gastos, pero este sencillo ejercicio es el primer paso para hacer un balance de nuestras finanzas personales, que nos ayudará a aclarar la cuantía ingresada y aquella que podemos permitirnos gastar. Los gastos derivados de las Navidades y los Reyes podrían haber desequilibrado nuestro presupuesto.
Una vez que hayas puesto todos los puntos en tu lista, haz una segunda revisión y elimina aquellos gastos que no son necesarios. Identifica muy bien los pagos que debes considerar en enero (el colegio, la hipoteca, el seguro del coche, la renovación de seguro, los gastos médicos, el teléfono, la luz, el agua, el pago de otros seguros e impuestos...) y calcula bien, para que los gastos no se te vayan delas manos. Enero es también época de rebajas: con esos cálculos, determina una cantidad límite que puedes gastar, y no la superes.
Reduce tus deudas
Una vez que hayas terminado tu lista de ingresos y gastos, piensa si te conviene realizarlas compras previstas justo en ese momento. ¿Es enero un buen mes para realizar un cambio de armario, por ejemplo, aprovechando las rebajas? Quizá la respuesta es positiva, debido a las ofertas que proliferan en este momento del año. Pero siempre piensa si lo que vas a comprar es necesario, antes de gastar.
De hecho, el gasto viene detrás del pago de la deuda. Si tienes deudas, piensa en devolverlas antes de realizar gastos innecesarios.
Gasta encosas que generen ahorro
De tu lista de gastos, detecta aquellos que te puedan generar un ahorro futuro. Por ejemplo, un cambio de línea telefónica o de Internet que a la larga suponga ahorro o la mejora del sistema de calefacción o iluminación del hogar que más adelante aligerará las facturas.
No te agobies de más y prémiate
Finalmente, también date tus caprichos, y también a tu familia. No todo debe ser ahorrar pero sí debes tenerlo en mente como hábito. Cumplir las metas para las que se ahorra también es satisfactorio, y muestra que ese ahorro constante tiene finalmente sus recompensas, de igual forma que sucederá en el momento de la jubilación.