Si estoy percibiendo una pensión de jubilación, ¿puedo recibir una ayuda por dependencia?
La pensión de jubilación no impide el acceso a la protección por dependencia, pero su cuantía determina el importe de las ayudas.
El derecho a la protección por dependencia
El sistema de protección por dependencia reconoce ayudas para atender a las personas que, por edad, enfermedad o discapacidad, requieren asistencia para desarrollar las actividades básicas de su vida diaria.
El procedimiento para el reconocimiento de la situación de dependencia, que permite el acceso a los servicios y prestaciones del sistema, se inicia a instancia del interesado.
El reconocimiento de este derecho es compatible con la pensión de jubilación del beneficiario.
La valoración de la dependencia
La protección concedida depende de la valoración de la capacidad del solicitante, en la que se tienen en cuenta principalmente sus informes de salud y su entorno habitual. Esta valoración puede ser revisada cada 6 meses.
Los grados de valoración son:
- Grado III. Gran Dependencia: cuando la persona necesita ayuda para realizar diversas actividades básicas de la vida diaria y además precisa de otra persona de forma general.
- Grado II. Dependencia Severa: cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria, pero no requiere el apoyo permanente de un cuidador.
- Grado I . Dependencia Moderada: cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria, al menos una vez al día o tiene necesidades de apoyo limitado para su autonomía personal.
Tipos de prestaciones reconocidas
El contenido de dichas ayudas depende de los presupuestos de cada una de ellas.
La prestación económica para ser atendido en el entorno familiar
El beneficiario de la protección de dependencia recibe una cantidad mensual que depende de su capacidad económica, y del grado reconocido.
El importe se concede con el objeto de que puedan ser atendidos por cuidadores no profesionales de su entorno. Es decir, el cuidado lo realiza el cónyuge o un familiar hasta el tercer grado que haya convivido un año con el beneficiario.
Es una decisión propia del beneficiario, cuando opta por recibir los cuidado en su vivienda.
La prestación económica para contratar a un asistente personal
Se trata de una cuantía económica mensual que se asigna al beneficiario para contribuir a la contratación de un asistente personal profesional. El importe depende del grado de dependencia y de la prestación fijada.
Pueden acceder a esta prestación las personas reconocidas en situación de dependencia, independientemente del grado.
La prestación económica vinculada al servicio
Tiene por objeto cubrir los costes del servicio de atención y debe ser prestado por centro acreditado para la atención a la dependencia, que deberá elegir el beneficiario.
Es una prestación económica periódica, cuyo objeto es la financiación de los costes del servicio de atención residencial, atención diurna o ayuda a domicilio.
Los servicios de atención
En general se ofrecen servicios de atención residencial, atención diurna, ayuda a domicilio y teleasistencia, cuando el beneficiario opte por esta forma de cubrir sus necesidades y, además, así se reconozca por los servicios sociales.
La relación del importe de la pensión con los derechos a la dependencia
Las cuantías máximas de las prestaciones económicas se establecen anualmente para los distintos grados con derecho a prestación.
El importe de las prestaciones económicas se determinan aplicando a la cuantía un coeficiente reductor, según la capacidad económica del beneficiario.
De esta forma, el importe de la pensión de jubilación no va a ser determinante para la concesión de la protección, pero sí para el establecimiento de la cuantía de las ayudas de dependencia.